Se termina un año más. Y se cierra también el ciclo de una importante empresa en La Orotava, la librería Miranda. Fundada en 1900, ha persistido hasta este mismo día de fin de año de 2008. Toda una institución de la cultura, de la tolerancia. Un lugar emblemático en el acontecer villero, acercando día a día la prensa y los libros. La literatura universal se mostraba en sus vitrinas y estantes. Nos permitía adentrarnos en todos esos pensadores, escritores, de diversas generaciones, entre lo clásico y lo moderno, de lo vanguardista y de lo local. Un espacio abierto al pensamiento, a la riqueza literaria. Y hoy ha cerrado sus puertas. Un día alegre y triste. Alegre por mantener durante un siglo la llama viva de la cultura, triste porque se va al terreno de la memoria su actividad y su influencia en nuestro entorno. Pero su llamarada de cultura no desaparecerá.
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