16 de diciembre de 2008

Que son dos días...

Estamos celebrando, por estas fechas, las típicas comidas de empresa. Allí todos reunidos alejados del trabajo y en buena camaradería buscamos celebrar una jornada de alegría y diversión. Claro está que se aprecian las buenas viandas que aparecen en surtidos platos. También se valoran los buenos caldos, de reserva, crianza o nuevos que mojarán los paladares...Y el buen estar con un ambiente sosegado, distendido y placentero. Unas jornadas que se repiten año tras año y que da un toque de sabor después de todo un largo tiempo en el trabajo cotidiano. Por eso, aunque estemos un poco perplejos por la situación económica y laboral, saquemos fuerzas y celebremos una vez más estas jocosas fiestas...Razón tenían con aquél legado popular ¡A vivir que son dos días!

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