21 de febrero de 2009

Un buen negocio...

La empresa acordó hacer un gran festín. Desde que tenía la exclusiva de venta de los microchips, el superávit había aumentado en un 150%.
La invitación fue en un restaurante chino, abierto recientemente en la ciudad. Su fama corría de boca en boca. Y allí fueron directivos y empleados.
Pidieron una gran diversidad de platos de la tradicional cocina oriental. Para acompañar eligieron un reserva de una bodega del Norte. Charlaban, comían y brindaban entre risas y jolgorio.
De repente, en medio del entretenido evento culinario, el presidente dio un mordisco a algo, que casi le parte los dientes. Miró extrañado a un lado y otro. El resto de los comensales atónitos le observaron y él sorprendido extrajo de la boca un pequeño artefacto; un microchip para animales de compañía dentro de un poco de carne de su rico manjar.
El negocio prosperaba. Sus productos los usaban hasta en los centros más chics...

4 comentarios:

Hiperbreves S.A. dijo...

Jejeje. Muy bueno, aunque no sé si volveré a comer en un chino...

josé luis dijo...

No sé si acabó bien. O se presta a ambiguas interpretaciones.
Gracias por tus visitas.

LQS dijo...

Diosssssss, puagggggg!!!!!! estoy a puntito de comer.
Muy bueno, y los títulos de tus blogs son de lo mejor que he leído.
Saludos.

josé luis dijo...

¡Dios, que negocios(ficticios o reales) hay por esas tierras...(reales o ficticias)
LQS, siento que lo hayas leído en mala hora...
Saludos