3 de marzo de 2010

En un vacío...

 

Se quedó abstraído en un vacío
sin dimensiones, ni  sueños.
No pudo regresar al manantial
del que brotaban ilusiones.

Se encerró en su silencio,
mientras la luna 
dejaba su llanto
para que regresaran
las golondrinas
con sus aleteos
 y pirihuetas.

Entre el humo volátil,
la cabeza cansada
y la imaginación perdida,
esperó la llegada
de un  nuevo horizonte.

4 comentarios:

Merce dijo...

Me recuerda el vacio que sufre una persona cuando su cabeza decide que está cansada, agotada...

Es un poema intenso lleno de significado.

Un abrazo

josé luis dijo...

Me lo sugirió ese dibujo de arriba. Una mirada a esos momentos de cansancio y perdida de la fuentes...


Un abrazo.

@da dijo...

A veces los nuevos horizontes no presagian buenas nuevas, JL...

josé luis dijo...

...Y tanto, que a veces suelen traer nuevas tempestades. Hay que seguir buscando...aunque tal vez todo está más cerca de lo que pensamos.

Saludos.