20 de septiembre de 2009

El padre.

Para Concurso Minificciones septiembre.


60 • El padre (Concursa)

El cura le dio un fuerte coscorrón al monaguillo y le mandó a tocar las campanas. La vieja ermita, blanca y reluciente se llenó de bullicio. Los novios se acercaban lentamente hacia el altar. Unos pequeños portaban bandejas de cobre y las jarras de oro. El olor de azahar se extendía entre los cuerpos en aquel corto recinto.
En los ojos de las solteronas, de las ancianas y de los varones se leían la envidia, la añoranza y el deseo voluptuoso. La novia, con el ramo de flores en sus manos, caminaba junto al padrino llena de júbilo. Ante el altar, el párroco, alto y grueso, miraba a la novia.

Por fin, los padres de los novios reflejaban en sus rostros la satisfacción por el enlace de sus hijos. El párroco mostraba cierta torpeza en sus movimientos. Ya en la ceremonia preguntó ante la mirada expectante de todos los presentes: “Anacleto, ¿Quieres a Genoveva como esposa….? “ Si, quiero”. “Y tú, Genoveva, ¿Quieres a Anacleto como tu esposo, … hasta que la muerte los separe?” “Si, quiero”. Respondió con seguridad la joven. “Os declaro marido y mujer, lo que Dios ha unido…”

En ese momento un sonido seco estalló en la iglesia. El eco rebotó más fuerte aun. Un cuerpo cayó al suelo ante la extrañeza de los convidados. El recinto quedó bañado por un charco de sangre. En la mano de Genoveva, la pequeña pistola esparcía un humo blanquecino y el olor a pólvora. Entre los gritos, sobresalió la voz clara de la recién casada: “Ya no habrá más padre que tú, Anacleto”. “Nuestro hijo verá clara la luz del nuevo día”. Ante el estupor de la gente, salió bajo el pórtico de madera cogida a su marido. En el piso de la ermita quedó el cuerpo yacente del párroco.

El monaguillo corrió a tocar las campanas, que sonaron a duelo. Una gran polvareda tras los caballos marcaba un nuevo camino, mientras los lánguidos ladridos de los perros testificaban la presencia de la muerte...

por José Luis Sánchez — Septiembre 19, 2009 @ 11:14 am

2 comentarios:

LQS dijo...

Es que, aunque madre no hay más que una, la posiblilidad de padres es mucho más alta.

Un beso

josé luis dijo...

Será por eso...y es la estadística la que manda...

Saludos