Dibujo de J.L. Sánchez
Y vio como el programa le ofrecía otras posibilidades. Miró curioseando y se lanzó a probar la nueva página. No sabía realmente que podía hacer con ella pero si no lo intentaba se mantendría en su ignorancia. Y, sin pensarlo mucho, se metió en aquella nueva aventura en espera de satisfacer su curiosidad. Ya recordaba aquellos tiempos cuando le decían que el origen de la filosofía estaba justo en la voz griega "alezeia". En esa palabra mágica que incitaba a aprender e investigar. Parecía que estaba escuchando al viejo profesor en sus explicaciones a los jóvenes aprendices...
Y vio como el programa le ofrecía otras posibilidades. Miró curioseando y se lanzó a probar la nueva página. No sabía realmente que podía hacer con ella pero si no lo intentaba se mantendría en su ignorancia. Y, sin pensarlo mucho, se metió en aquella nueva aventura en espera de satisfacer su curiosidad. Ya recordaba aquellos tiempos cuando le decían que el origen de la filosofía estaba justo en la voz griega "alezeia". En esa palabra mágica que incitaba a aprender e investigar. Parecía que estaba escuchando al viejo profesor en sus explicaciones a los jóvenes aprendices...
5 comentarios:
Anda... y esto cómo se hace?
De pronto vi la pestañita arriba...
¡Qué sorpresa, Usted, por aquí! Menos mal que no ha perdido la curiosidad. Pensé que se iba a quedar la nueva página siempre vacía. Pero, afortunadamente, la encontró. Hace tiempo y ya ni me acuerdo. Cuando lo redescubra se lo haré saber.
Hasta luego.
Esto está muuuu parao...
Sigue estando mu parao, JL
(veo que sigues manteniendo las orquídeas en Alisios...)
Y tan parao, que asusta...
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